domingo, 14 de diciembre de 2014

La rama .- The branch

No hay  palabras para  el  desamor
no las  hay… no  las  busques
Tan  fuera  de  natura está
que  no puede definirse
Ese  vacío  que  pesa…
Esa  losa que  lo  aplasta
Esa  exclusa  contenida
de  dolor en  la represa,
agüeras  lagrimeantes
que  por  la  garganta  pasan
donde  no  se  vea el  cauce
bajo  la  piel  enterradas.
Ese esperar sin  sentido
un  amago  de  algún  gesto
que  no  sea  de  desdén,
aunque  sea  simplemente
como  el que das  a tu perro
… no  a  tu  hijo,
 ni  tan  siquiera  el de un  amigo,
o… a  ese  extraño que  recibes
con  la  sonrisa  y  el beso.
Algo que  con  la  imagen
de  un cariño se complete
el de un perro bastaría.
Un  poco del  que derrochas
con  quién  no tiene  tu  sangre
ni  tú  has  traído a  este  mundo.
No  sé  por qué  te  elegí,
pero  sabía  qué  hacía,
solo  espero  retornar
para  poder comprender
por qué  te  quise  tan  mía.
V.Nas